Alcalde de Arica anunció visita del concejo municipal a ex cárcel para conocer iniciativa de sitio de memoria
En los puntos varios de la sesión ordinaria del concejo municipal de Arica, el 16 de noviembre, el alcalde Gerardo Espíndola anunció que coordinará una visita a la ex cárcel pública, ubicada en el centro de la ciudad, junto a los concejales, para conocer, en terreno, la iniciativa de declarar ese recinto como sitio de memoria, por haber sido un espacio de detención política y tortura durante la dictadura.
Asumió ese compromiso luego de la intervención, en dicha sesión, de la antropóloga Malva-marina Pedrero, quien, a solicitud de la Agrupación “Mujeres, Memoria y Derechos Humanos”, está a cargo del expediente que debe ser presentado al Ministerio de las Culturas y de las Artes para lograr este objetivo.
El alcalde Espíndola reiteró su compromiso con esta iniciativa ciudadana y comentó que esta visita podría realizarse durante diciembre próximo. La autoridad ya había expresado su respaldo durante la ceremonia de lanzamiento de la campaña y recolección de firmas para esta iniciativa, con motivo de la conmemoración del golpe de estado del 11 de septiembre de 1973 en el frontis de la ex cárcel de Arica.
En los puntos varios de la sesión, también manifestaron su respaldo, tanto a la visita como a la postulación, las concejalas Ninoska González y Dolores Cautivo.
Pedrero, en su intervención, explicó que, en la comuna de Arica, hay diecisiete lugares que fueron usados por el Estado chileno como centros de detención y tortura o por la ciudadanía como escenarios de resistencia y lucha, pero que están completamente invisibilizados. Explicó que declarar un sitio de memoria, permite no solo homenajear a las víctimas de graves violaciones a los derechos humanos sino construir una cultura de la paz.
Comentó que la agrupación “Mujeres, Memoria y Derechos Humanos” sabe que hay juntas de vecinos del barrio de la ex cárcel y servicios públicos que han manifestado su interés en ocupar ese edificio. Sin embargo, recalcó que la declaración del Ministerio de las Culturas permite armonizar los intereses de distintas organizaciones y promover las memorias olvidadas de los barrios, de los pueblos indígenas y de las mujeres de la zona.
Enfatizó que: “La memoria es una poderosa vacuna contra la muerte y también un alimento indispensable para la vida, Por eso, el que no tiene memoria, está muerto, y quien cuida y guarda la memoria, guarda y cuida la vida”.
